CORRIDAS DE TOROS
Las corridas de toros se han considerado siempre un arte español. Consisten en llevar a un toro a una plaza donde es humillado por el torero que le hace correr tras él con el fin de divertir a otras personas, cuando para el astado claramente solo supone sufrimiento y muerte. Por lo tanto, no lo consideraría un arte si no más bien un acto de crueldad puesto que, al fin y al cabo, las corridas de toros significan el maltrato de un animal.
Existen tres opiniones principales respecto a este tema. Las de aquellas personas que defienden este “arte”, las que denuncian estos actos y los que optan por mostrarse indiferente. A los primeros solo les interesa disfrutar y pasar un buen rato sin importarles el daño que se los hace. Por otro lado están los antitaurinos que se manifiestan reivindicando la eliminación de estos actos y defendiendo los derechos de los animales. Por último una gran mayoría que no se para un segundo a pensar porque ¿para qué? Si no les incumbe.
Hay fiestas populares, como la del toro de la vega en la que se mata al toro con lanzas después de haber sido maltratado anteriormente. Otro ejemplo es el toro embolao en la que se le atan unas bolas inflamables a los cuernos y se les prende fuego para que el riesgo sea mayor y por ello mas excitante para los participantes, provocándole al animal graves quemaduras.
En mi opinión, la mejor solución seria mantener la tradición del toreo, pero cambiando aquellas acciones que hacen sufrir al animal, como ponerles las banderillas o el estoque final, para así valorar la faena taurina.
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eduardo peña ruiz -