Bullying cibernético: un nuevo medio para el acoso escolar.

El Bullying cibernético es una variante del Bullying o acoso escolar que consiste en utilizar medios electrónicos, como pueden ser los ordenadores o los teléfonos móviles para acosar, intimidar y agredir psicológicamente a las víctimas, difundiendo por Internet información, correos, videos o fotografías que atentan contra la intimidad del agredido. Está protagonizado por un acosador(es) hacia alguno de sus compañeros. Esta actividad está afectando día tras día a la vida de muchos alumnos y alumnas de diferentes institutos

En este medio, el acosador, al no mostrar su aspecto físico, se siente más seguro y protegido, lo cual le incentiva a dañar sin piedad al acosado. El alumno no se atreve a denunciar las agresiones por miedo y vergüenza, debido a que con frecuencia  no solo utilizan insultos, sino también cierta información intima del acosado.

Al observar el video de la historia de Amanda Todd podemos darnos cuenta de que se trata de un acoso mucho más peligroso,  pues llega a tener unas gravísimas consecuencias, el propio suicidio.

A mi juicio, y como solución, plantearía una mayor comunicación y confianza entre padres e hijos, averiguar si sufren cambios de estados propios del Bullying, tales como: malas calificaciones académicas, melancolía o tristeza, conocer el mundo de internet con sus hijos y limitar su acceso a determinados sitios webs con la utilización de filtros, pues de esta forma se reduciría el riesgo de ver contenido inapropiados (sexo electrónico), y de igual forma la acción de llevarlo a la práctica. Además convocaría reuniones informativas en cada uno de los centros escolares para transmitir a los alumnos una realidad como es la del Bulliying, explicando cómo hacerla frente: no contestes a las provocaciones, no facilites datos personales, si te molestan, abandona la conexión y pide ayuda, advierte a quien abusa de que está cometiendo un delito, etc.