Víctimas y sospechas
"No salgas con esa ropa de casa". "Van provocando, van pidiendo que las violen". "Algo haría para que le pasara eso". Frases como estas las habrás escuchado más de una vez y hacen alusión al vestuario, el aspecto o la conducta de las mujeres que han sufrido abusos sexuales o violaciones. Recientemente ha sido noticia el caso de la chica violada en San Feermín en Pamplona por un grupo de amigos que se autodenominaban la manada. La víctima fue seguida por unos detectives privados que buscaban ejemplos de comportamientos que pudieran comprometerla.
¿Qué opina usted de este caso, de los comentarios que he citado y sobre cuáles deben ser los límites que deben marcarse en la conducta sexual para que esta no se convierta en un abuso o, directamente, en una violación? Como siempre aquí tiene información; pero no le aconsejo que vea el documental danés que abre estas líneas:
https://elpais.com/elpais/2017/11/15/opinion/1510768873_516497.html?id_externo_rsoc=FB_CC
https://elpais.com/elpais/2017/11/14/opinion/1510687140_730723.html
1 comentario
María Pascasio -
Increíble pero cierto, en pleno siglo XXI se sigue creyendo que una mujer es la que tiene la culpa a la hora de ser violada. Si la violaron fue porque llevaba una falda muy corta, la manera en la que andaba no era normal, lo iba buscando, con esa ropa tan ajustada y ese maquillaje tan cargado que pretendía. Comentarios así siguen escuchandose porque cualquier sitio cuando sale la noticia de una nueva violación.
En mi opinión, hasta una simple mirada perturbadora ya es abuso, ya que con esta pueden violar tu intimidad y también tus sentimientos. No creo que se puedan poner unos límites, ya que para cada persona tiene un carácter distinto y puede aceptar ciertos actos que otras nunca permitirían. Si es verdad que la persona que realice la violación debe ser castiga con el mayor castigo que se pueda impugnar en cada país, ya sea la cadena perpetua o la pena de muerte.
Lo que sí tengo claro es que: NO ES NO. No por ser mujer se tiene que tener miedo a ir sola una noche oscura, a vestir de forma más o menos provocativa, lo que hay que inculcar a nuestros jóvenes, y sobretodo a las generaciones venideras es que las mujeres son libres, y que los hombres no tienen ningún derecho sobre ellas. En definitiva, menos consejos para que una mujer no sea violada y más enseñar a los hombres a que nunca se les pase por la cabeza realizar esta barbarie.