Acoso y Ciberacoso

La cifra de acoso tanto escolar como cibernético es alarmante. ¿Y no vamos a hacer nada?

El caso de suicidio de la joven Amanda Todd por acoso escolar y a través de Internet ha conmovido al mundo. Chateó con un desconocido y le mandó una foto desnuda, este acosador la difamó y todo el mundo la vio. Esto cambió su vida hasta el punto que tuvo que cambiarse de colegio aunque no le sirviese de nada, pues las burlas y las agresiones no cesaron. Ella subió un video a Youtube para pedir ayuda porque se sentía muy sola. Y por último decidió suicidarse.

Esto ha hecho que los políticos de Canadá tomen medidas. Cosa que me parece vergonzosa; primero dejan que sucedan atentados como éste y después toman medidas.

Estos delitos tienen que castigarse con dureza por la ley, puesto que causan daños, tanto físicos como psicológicos, a las víctimas. Además los jóvenes deben tener mucho cuidado con las páginas de Internet que visitan, no chatear con desconocidos y mucho menos subir material personal.

Es aterrador como las personas pueden ensañarse con sus semejantes hasta hacerles cometer barbaridades. Estos criminales se merecen el peor de los castigos.